19 feb 2018

Sera por Planes de Desarrollo Regional de Cantabria.



Iñigo de la Serna y Lorenzo Vildal de la Peña
La verdad que resulta bastante ridículo ver el debate en el que se han enredado el Presidente de la CEOE Vidal de la Peña y el Ministro de Fomento Iñigo de la Serna, con el Presidente de Cantabria Miguel Ángel Revilla por un nuevo  - por calificarlo de algo – plan de desarrollo regional que seguro no será otro que un remix de todos aquellos que se han venido elaborando desde hace años por Sindicatos, Patronal. Universidad, Consejo Económico y Social, Sodercan entre otros, que nos han venido recetando soluciones a los problemas endémicos que tienen nuestra región.

Y eso por no situarnos en tiempos más pasados en los que se hablaba de desarrollo - en muchos casos financiados por recursos europeos - que nos dibujaban un futuro de crecimiento económico muy especializado y competitivo  ante las regiones europeas y por supuesto españolas.

Palabras y mas palabras que se acompañaban de estadísticas y graficas diversas, más o menos intencionadas, que no han hecho más que dibujarnos una región nada competitiva y siempre amparada al cobijo de la evolución económica del conjunto del país, porque Cantabria como tal siempre ha sido incapaz de definir un espacio económico propio por el que luchar a medio y largo plazo.
Y ahora va el bueno de Lorenzo Vidal de la Peña con el concurso de Iñigo de la Serna, y se ponen a la faena de elaborar un nuevo plan de desarrollo regional, - haya para el 2030 - donde puedan caber promesas y mas promesas de inversiones millonarias del Ministro y cambios estructurales en el Nuevo Patrón de Crecimiento del que es impulsor el Presidente de la CEOE, y de paso se puedan beneficiar el uno y el otro, en las próximas elecciones políticas que ya están a la vuelta de la esquina.

Porque ya me dirán ustedes, que diferencia puede existir entre este nuevo invento, y el Acuerdo Marco por el Empleo, la Adhesión Social  y el Desarrollo Económico de Cantabria 2015 - 2019 que firmaron nada más y nada menos, que el Presidente Revilla, la Vicepresidenta  Díaz Tezanos el propio Vidal de la Peña y los Secretarios Generales de UGT María Jesús Cedrun y Carlos Sánchez de CCOO, y en el que se comprometía entre otras cosas el Gobierno, a modificar la Ley 4/2009 de Participación Institucional de Cantabria, para incluir en ella un Consejo General del Diálogo Social presidido por Miguel Ángel Revilla que le convertía en un instrumento político de primer orden y que bien pudiera condicionar entre otros el debate de los presupuestos regionales cada año, un acuerdo  que abría espacios de debate a futuro para el nuevo patrón de crecimiento económico, el impulso siempre pendiente para el Besaya y para los sectores de Empleo, Medio Ambiente y Política Territorial, Industria y Energía, Turismo, Comercio, Transporte y comunicaciones, Forestal y Medio Ambiente, Obra Pública y Vivienda, Sanidad, Servicios Sociales, Agroalimentaria y del Sector Pesquero, en todos ellos con la presencia directa de los diversos Consejeros del Gobierno presidiendo cada una de dichas mesas.

Y ahora cabe hacerse la pregunta, el Presidente de la CEOE va a ser capaz de condicionar con su nuevo plan de desarrollo, al Gobierno de Cantabria, a la mayoría del Parlamento Regional que en definitiva aprueba el gasto aña tras año, al Ministerio de Fomento hoy en manos de Iñigo de la Serna y mañana dios dirá, de que estamos hablando entonces, porque no se centra la CEOE y los sindicatos UGT y CCOO en una estrategia común que obligue al gobierno regional a cumplir lo que firma y a no demorar sine día soluciones urgentes de todos conocidas, después de los muchos debates y planes de reindustrialización y desarrollo elaborados.

Hacer mala política con la necesidad de Cantabria me parece vergonzoso, por eso no acabo de entender este ridículo enfrentamiento entre el Gobierno de Cantabria y el Ministro de Fomento, soy de los que pienso que Iñigo De la Serna  está preparando el desembarque de nuevo en Cantabria  y la mejor forma para hacerlo es enfrentándose con Miguel Ángel Revilla a base de promesas abiertas en el tiempo y de paso criticar y minusvalorar las iniciativas políticas del gobierno regional, y eso no es correcto, la participación del gobierno de la nación se debe hacer con respeto institucional no metiendo el dedo en el ojo a nada que se pueda, para eso ya tiene al Partido Popular, aunque mucho me temo que ante su descomposición, el ministro ya ha tomado la decisión de intervenir en la política regional directamente, una pena.