10 feb 2024

El Mercado del Este. Robado a los santanderinos para hacer negocio

 

Tras una importante restauración que nos costó a todos unos 5 millones de euros, se transforma en una "galería comercial" que, según el Diario de Montañes, es una de las ofertas turísticas más preciadas de Santander.

A pesar de las promesas que alguna vez nos hizo la Corporación Municipal de Bien de Interés Cultural, hoy esta importante obra del arquitecto Antonio Zabaleta sigue siendo un mercado para turistas gourmet y un paso de peatones entre calles para los locales.

Si vas a pinchos, tapas, raciones o restaurante, agárrate que vienen curvas. Para los turistas un precio de esos "alto" pero para nosotros, un auténtico "sablazo", pero ya sabes, aunque estés en casa - lentejas, si las quieres bien y sino las dejas – o pagas como turista o pasas de largo, camino de Puertochico para regresar por Peña Herbosa y arreglarte en uno de sus establecimientos.   

Por cierto, ni se te ocurra hacer pis, porque si no tienes los 0,20 euros o las fichas de rigor, el orinar puede convertirse en un grave problema, al menos hasta llegar a la plaza de las farolas, y eso con un poco de suerte.

En fin, las cosas del Santander turístico, que nos ha metido a cañón la corporación municipal, porque en esto parece que están muy de acuerdo los de la derecha y la izquierda.   

6 feb 2024

65 millones de euros tienen la culpa.

 

Para abonar más peonadas a los médicos y para derivar pacientes a las clínicas privadas. Este es el Plan Integral de Reducción de las listas de Espera 2024 – 2026 que la presidenta Buruaga y el consejero Pascual nos han presentado recientemente, un plan que se repite una y otra vez, sin que hasta la fecha haya resuelto el grave problema de la ya añeja “lista de espera” en Cantabria.

Ahora disfrazado con hasta ocho pautas administrativas - ya conocidas - como la mejor utilización de los recursos sanitarios, y de paso la clásica acusación a la herencia recibida. Se propone un nuevo plan a tres años, que según el consejero va a poner a los pacientes cántabros en retrasos de 80 días para las intervenciones quirúrgicas, 40 días para las primeras consultas y 30 días en el caso de las pruebas diagnósticas.

Han tenido que pasar siete meses para que el gobierno de Buruaga reconozca su primer y gran fracaso, cuando nos contó que resolvería el problema de las listas de espera en sus primeros cien día de gobierno sin costes añadidos.

Como ejemplo de tan importante plan de gestión, según recogen los medios de comunicación, cubrir los tiempos muertos cuando los quirófanos se queden parados por improvistos, una medida de gestión sanitaria que provoca bochorno al no estar resuelta.

Mientras esperamos a una valoración empírica del plan y a la opinión de la Junta de Personal y otros sindicatos, solo queda confiar en que esta vez, el plan integral de reducción de lista de espera, sea eficaz de verdad, o al menos dejen de crecer las listas.

Las líneas de actuación que se anuncian como solución al problema, según mi opinión, son bastante genéricas. Quitando aquellas que tienen que ver con los dineros para médicos y clínicas privadas, el resto son de carácter administrativo, - elaboración de un registro de lista de espera, mejorar los procesos administrativos e institucionales y actuar sobre catálogos y protocolos – que ya deberían estar resultas y formar parte del día a día de la gestión sanitaria.

Las otras actuaciones - en buena parte ya ensayadas – pudieran ser más eficaces. Poner orden en las suspensiones quirúrgicas, ampliar la jornada en actividad quirúrgica efectiva, darle más eficacia al equipamiento e infraestructuras, e Implantar sistemas de retribución variable, eso si, siempre que en ellas colaboren todos los estamentos sanitarios, no vaya a ser que solo sean los médicos quienes perciban el aliciente económico provocando el efecto del agravio comparativo con el resto del personal sanitario afectado.

Pero bueno vamos a darle un voto de confianza al consejero Pascual, a ver si esta vez va la definitiva.

25 ene 2024

Al final esto de las lista de espera va a ser cosa de la herencia recibida

 

Es la conclusión del consejero Cesar Pascual, para justificar la lista de espera. En consultas de 38.711 pacientes con una demora de mas de dos meses, y en quirúrgica 18.505 a diciembre 2023, listas que no hacen más que crecer, y que pone a los cántabros a la espera de mas de seis meses para recibir una intervención quirúrgica.

Han pasado siete meses de gestión del PP, y ya se puede concluir que, solo contratando con Santa Clotilde, Mutua Montañesa, Hospital Mompia entre otras clínicas privadas, y abonando complementos del 20% a los médicos las listas de espera pudieran tener alguna solución., eso si, arrimando millones de euros que deberemos pagar entre todos los cántabros, a no ser que asumamos la recomendación del consejero de no hace mucho tiempo, que nos invitaba a pagar los servicios sanitarios por nuestra propia cuenta, convirtiéndonos en una especia de ciudadanos Business.

Ahora dice que va a meter mano a la organización sanitaria para que se trabaje más y mejor, vamos, como hizo el consejero socialista anterior, y buena bronca que le produjo. Mientras tanto, pacientes que esperan y desesperan, o se mueren sin recibir la ansiada intervención médica, eso sí, buenas palabras que no falten.


9 ene 2024

Despedida y cierre, el balance 2023 de Manuel Angel Castañeda


Dice Castañeda en su balance del año 2023 publicado en el Diario Montañés del pasado treinta y uno de diciembre “Melancolía Cantabria” que nosotros los cántabros, tenemos el ánimo por los suelos, que estamos frustrados por no haber alcanzado los objetivos marcados, aquejados de una singular depresión y un poco envidiosos “mientras vemos como una gran parte españoles prosperan a mucha mayor velocidad”.

Y como prueba de tanta depresión y mal rollo de la política regional, la lista “cansina” de siempre:

Los espigones de la magdalena, de utilidad puntual según mareas y negocio para algunos, pero vale, que se pongan de acuerdo los del Instituto Hidráulico de la Universidad con el Gobierno Central y lo resuelvan de una vez. El AVE, retenido por tierras palentinas según unos y poniendo las vías los otros, todos esperando que llegue cuanto antes a Reinosa, y de paso más leña para Revilla por incumplimientos en los plazos.

Y ya puestos para redondear la causa depresiva, la depuradora de Vuelta Ostrera sometida a litigio, funcionando a todos gas a la espera del acuerdo que haga posible la construcción de una nueva, en terrenos que no violenten a nadie. Ridículo si que parece, pero que sea un problema político que desajuste el ánimo de los cántabros como que no.

Menos mal que ahora gobierna la derecha y lo arreglara todo, y en lo que pueda quedar pendiente, ya se sabe, la culpa el malvado Sánchez y los acuerdos con los partidos independentistas.

Que no llega la Protonterapia a Valdecilla, que el nuevo carril de Laredo a Bilbao se retrasa pues eso, la culpa el maldito Sánchez y los dineros que no acaban de llegar. Que las farmacias se pelean entre ellas para el servicio de guardia de 24 horas, que andamos un poco despistado en asuntos de cultura, con el museo Reina Sofia y los retrasos en la reforma de la Biblioteca Menéndez Pelayo, bueno dale tiempo y ya buscaremos algún que otro culpable.

Aunque siempre nos quedara la hostelería, el turismo, la planta de hidrogeno en los terrenos de Sniace, la ampliación de los terrenos del puerto y la bajada de impuestos, que de la mano del PP nos va a dar muchas alegrías y paginas de propaganda en el Alerta.

Y yo me pregunto, porque no escribes un poco de los problemas de los ciudadanos con nombre y apellidos, porque no hablas de la vivienda, de los bajos salarios, de los retrasos de los trenes de cercanía, de la sanidad y las listas de espera, de los barrios, de las cosas que sufren día a día los cántabros….

De verdad vas a seguir escribiendo sobre lo de siempre cargando la culpa al estado, haciendo la lista de agravios que llevamos años repitiendo, dale una vuelta y recupera tu sensibilidad social que según mi opinión tenías. 

8 ene 2024

Relato Gotico "La maldicion de Lina" por Lucas Mazon

 

Era invierno, el señor feudal de la aldea de Pasofrio, Rudolf, cobraba sus deudas con normalidad y cuando le llegó el turno a Edgar, este le pidió a su superior que le perdonase su tributo a lo que el soberano respondió que por semejante insolencia debería pagar el doble de lo habitual,

Edgar en un ataque de rabia se abalanzo en un intento de agredir al conde, pero Rudolf fue rápido y con dos estocadas de su espada mato a Edgar y sin inmutarse declaró:

Que esto sirva de ejemplo para el resto.

Yo te maldigo Rudolf de Pasofrio, pasaras las peores atrocidades y ni aun así serás perdonado. Dijo una voz de entre el público.

Y quién eres tú, qué quieres seguir la suerte de este campesino.

Soy la mujer de Edgar, Linda.

Entonces Rudolf se asustó de verdad porque todo el mundo sabía que la maldición de una viuda con el corazón roto era la más eficaz. Sin atreverse a responder espoleo a su caballo y se marchó de la aldea sin cobrar las rentas restantes.

Paso una semana sin salir de su alcoba salvo para comer y se cuidaba de que todo lo que ingería era probado antes por algún siervo, una semana después se repuso y decidió a salir de su cuarto e ir a cobrar sus cuentas atrasadas, mientras galopaba hacia la aldea de Ramalta uno de sus acompañantes hizo el amago de ir a tomar otro camino lleno de ramas y. Detente, no iremos por ese camino, podría caerme una rama en la cabeza y dejarme paralítico o a lo mejor me ataca un proscrito.

Pero vamos armados y nos ahorraremos un par de horas.

¡No cuestiones la palabra de tu señor!

Rudolf y su sequito continuaron por el camino más largo y un comerciante que los vio tomó el atajo avisó a la aldea, haciendo que el viaje del conde fuera en vano.

A lo largo de los tres años siguientes, a Rudolf se le fue olvidando la maldición, cayendo cada vez en un rincón más aislado de su memoria.

Un día le llamaron para la guerra en Francia, Rudolf recordó la promesa de esa mujer y se preguntó si moriría en la guerra como castigo.

De camino a reunirse con el ejército, su barcaza estuvo cerca de hundirse y aunque la embarcación no fue destruida, perdieron una de las dos velas y murió la mitad de la tripulación dejando a los supervivientes a la deriva.

Nos ha atacado un monstruo marino. – Dijo Rudolf. Ha sido una fuerte tempestad, nada más. – Respondió uno de sus acompañantes. ¡Incrédulo! Os he condenado con mi maldición – Le rebatió.

Llegaron a Francia con una semana de retraso para encontrarse con campos arrasados, poblaciones exterminadas y ciudades saqueadas y destrozadas hasta los cimientos. La legión de caballeros y su señor avanzaron rápidamente tratando de alcanzar al grueso del ejército.

Cuando estaban a una jornada de su objetivo tuvieron que cruzar un vado de medio kilómetro, esto no le hizo mucha gracia a Rudolf que se tuvo que quitar la armadura al igual que sus compañeros dejando a todo su ejército indefenso. Antes de que alcanzaran tierra seca, les atacó una jauría de sabuesos gigantes acompañados de flechas emponzoñadas que salían de todas partes.

Los que estaban adelante eran víctima de los sabuesos demoniacos y sus compañeros les empujaban intentando salir del vado para buscar refugio de las flechas. A Rudolf le impactó una flecha en el hombro dejándole con un brazo inservible, con solo un brazo se agarró a un caballo muerto y rezo a dios por piedad.

Más tarde se despertó y por lo que vio a su alrededor se dio cuenta de que estaba en un monasterio.

Bien veo que ya te has despertado, te encontramos en el rio y decidimos curarte, pero por desgracia no pudimos salvar tu brazo.

Le dijo un monje que hablaba un inglés muy rudimentario.

Acto seguido Rudolf se palpo el costado y vio que no tenía brazo, pero no gritó simplemente se sintió triste.

¿Qué les ha pasado a mis caballeros? – Preguntó.

Eres el único superviviente, aquello fue una carnicería. – Le contestó el monje.

¿Y qué vais a hacer conmigo?

Dios nos enseña a ser piadosos, pero lo que habéis hecho los ingleses no se puede pasar por alto, así que te entregaremos a la justicia.

Rudolf estaba seguro de que acabaría colgando de la horca, aceptó su destino y se hecho a dormir. De los siguientes días Rudolf solo pude recordar pequeños fragmentos, como que le metieron en un carro y le llevaron ante el rey. Días más tarde se recuperó por completo y se encontró a sí mismo en una pequeña sala de piedra con un portón de madera, unas horas después un monje joven abrió una ranura y le paso un cuenco con potaje.

¿Qué ha pasado en los últimos días?  – Preguntó Rudolf.

No había nadie para atender tu casó así que nos dieron tu custodia.

¿Y el ejercito Ingles?

Ha sido rechazado.

Una cosa más, ¿Cuándo saldré de aquí?

El monje se fue sin responder y Rudolf comprendió que no iba a salir de allí. Encerrado en completa oscuridad, rodeado de sombras que se reían de él y sin contacto humano salvo para recibir la comida perdió la noción del tiempo y rara vez los monjes respondían a sus preguntas. Dos años después, que a Rudolf le parecieron siglos, la peste asoló al monasterio matando a todos los monjes y dejo a el prisionero sin fuente de alimento, Rudolf pensó que ya le había llegado la hora, pero la rendija se abrió y la voz que sonó le helo la sangre.

No sé si me recordaras Rudolf.

Claro que sí, tú eres la culpable de toda mi desgracia, Linda.

Aquí el único culpable eres tú, por tu culpa murieron mis tres hijos y casi muero yo, pero al contrario que contigo, dios fue compasivo y me ayudo a salir adelante.

Que haces aquí...

Cuando me enteré de que mi señor había sobrevivido me pareció adecuado ver cuan bajo había caído.

Ya me has visto, ahora déjame morir en paz.

Te voy a hacer un favor.

Le dio un cuenco de potaje a través de la ranura.

¿Porque me ayudas?

Porque quiero saber que pagaras por tus pecados, y quiero que tengas algo de tiempo para reflexionar sobre tu vida antes de encontrar a dios.

Gracias, pero tu maldición me a torturado durante diez largos años de desgracia.

Mi maldición no te hizo nada.

Pero el mar y los perros.

Una tempestad y una milicia francesa, tu causaste mi desgracia y yo la tuya, y para qué.

Linda abandonó el santuario y tres días después Rudolf se dio cuenta de que la puerta de la prisión estaba abierta, le pidió a dios que cuidase del alma piadosa de Linda.

De poco sirvió porque Rudolf contrajo la peste por la comida que habían manipulado los monjes infectados y finalmente murió en el camino a una hora del hospital más cercano.