2 sept 2023
22 nov 2022
El abrazo y la “tanda” en la milonga
Como entender más allá de su literalidad a la tanda, esos tres o cuatro tangos, que de forma armoniosa y de estilo similar, suenan en la milonga, antesala musical de la cortina - que por tiempo limitado es destinado a que cambien las parejas y liberen la pista - abriendo asi un nuevo ciclo de tango y con ello nuevas sorpresas.
Cuando
empecé a bailar tango, una de las primeras cosas que me dijeron, fue el sentido
de la tanda, la significación de esos tres tangos, agrupados en un todo y que encierran
en el tango “un sentimiento que se baila”.
Y asi el
primero de la tanda, el dedicado a conocerse y reconocerse en pareja, que, en
muchos casos, es la primera vez que bailan juntos y que necesitan de algún que
otro detalle para romper el hielo.
El segundo,
para interpretar el tango entre cortes y quebradas, giros, caminatas y ganchos,
que hacen lucir la expresión más armónica del tango bien bailado. Un tango que
da paso al tercero, el que sirve para que fluyan los sentimientos y el despertar
de las sensaciones en pareja y que cierran una tanda difícil de comparar con
cualquier otra, - la tanda con mayúsculas – la que al finalizar y acompañando a
la pareja a la mesa, te permite agradecer lo sentido he interpretado, con el
saludo y la gratitud de un tango bien “interpretado”.
Y aquello que,
para el musicalizador del tango en la escena, era simplemente una tanda más de
tangos similares, se convierte para la pareja milonguera, en un encuentro
intenso, emotivo y cargado de sensaciones y sensualidad.
27 feb 2022
Los burócratas de las milongas
Recientemente me suscribí a la publicación de tango METAFIERRO – The Tango Arts Magazine encontrando entre sus páginas un artículo que me ha llamado la atención. “Los burócratas del tango” de Ricardo Schoua - Director de la revista digital Tango y Cultura Popular - donde se hace una crítica a los “advenedizos” musicalizadores del tango, que someten a los milongueros a “tandas insufribles, con orquestas aburridas y cantantes intrascendentes”.
Desde este
comentario a los musicalizadores de la nada en Argentina, y añado yo también en
Europa, solo cabe hacerse una pregunta ¿porque se acepta este tipo de musicalización?.
Según
Schoua, porque ya se asume como costumbre consolidada, porque existe cierto temor
a cuestionar la música, a criticar los tangos que se ponen, so pretexto de ser
acusado de falta de conocimiento por los que dirigen y/o adulan a los
promotores del negocio de la milonga, en definitiva, porque están convencidos
que los que van a bailar, solo lo hacen por hacer pasos sin importarles la
música.
Desde estos
mimbres cualquier musicalización vale para una “tarde de domingo”, aunque, nada
más sea para atiborrarla de tangos que se repiten una y otra vez de milonga a
milonga, provocando el aburrimiento, e incluso las ganas de bailar.
Sin ninguna
duda hay que replantearse las milongas, hay que dejar a un lado a los Dj
“burócratas” que solo hacen musicalizar canciones, en tandas repetitivas y
música añeja, que cierra los espacios a nuevos tangos, a otros cantantes y
orquestas que se quieren hacer hueco en este difícil mundo del tango.
Concluye
este comentario tanguero, haciendo una llamada a recuperar las milongas, los
encuentros y festivales con orquestas en vivo. No se me escapa las dificultades
que esto tiene por ejemplo en Europa, pero lo que sí se puede hacer es cuidar
la musicalización de la milonga, para acabar con esa especie de copia que de forma
reiterada se repite vayas a la milonga que vayas.
14 feb 2022
La poética del tango “Seguí mi Consejo”
Entre los tangos también destacan aquellos que te ofrecen consejos. En este caso, los consejos de un jubilado que se empeña en vivir al margen de las pautas lógicas de su edad, invitando a todos a ser como él para presumir de lo imposible.
En el tango “Seguí mi consejo” del año 1929,
del maestro Eduardo Tronge y música de Salvador Merico, se recogen una lista de
consejos que van desde el “laburo, a las minas, pasando por la milonga y la
buena vida de la comida y bebida”, todo un listado de recomendaciones que
resulta bastante originales, sino fuera porque en el tango cabe todo.
Te invito a escuchar este tango https://youtu.be/6cDPpSBVx3c interpretado por Carlos Gardel, repleto de lunfardismos que le dan un
sentido especial a esos consejos del viejo milonguero ya jubilado, que se
permite reinterpretar su propio futuro a través del tango canción.
Estas son las
recomendaciones del tango “Seguí mi consejo” sugerencias que abren la vida a
nuevas sensaciones al margen de una vida metódica pautada en el trabajo diario.
29 ene 2022
El tango y el peronismo diez años de convivencia feliz
Una década,
la que gobernó el general Juan Domingo Perón, (1944 – 1954) “el candidato del
pueblo” que tuvo su sitio en el tango, con canciones de fidelidad a su gestión
política, en momentos de necesidad del pueblo argentino.
Fueron unos
años donde el presidente Perón impulso políticas sociales, y cambios profundos
en la recuperación de derechos políticos, laborales, culturales, sociales…, y
lo hizo gracias a las alianzas entre movimientos sociales de ideológica
socialista y sindicatos revolucionarios.
Pero no le
corresponde a este comentario de la “poética del tango”, valorar la figura del
general Perón ni su gestión política. Se trata simplemente de comentar algunos
de los tangos que le ensalzaron como persona y como político.
Entre la
amplia lista de tangos dedicados al general he elegido. “Se acabo la
mishiadura del maestro Enrique Rodríguez y Jose Paradiso, Una carta para Italia
de Santos Lipesker, La Marcha Peronista de autor anónimo, los Versos de un
payador al general Juan Perón de Homero Manzi, La Oda a Perón de Marino García,
La Descamisada de Enrique Maroni y la sindicalista Marcha de Luz y fuerza”.
En el tango “Se
acabo la mishiadura” https://www.youtube.com/watch?v=F61FxhjSjW8
se dice con la radicalidad del
convencido por Juan Perón, que en el nuevo “Buenos Aires se está de bute y la
guita anda bailando” y que todo el mundo tiene vento - dinero- “para ir al
Casino de Mar de Plata, donde va lo mismo el zapatero, el bacán y el verdulero
todos mezclados en el montón”, y ya puestos hasta el “preso esta de bute porque
le quitaron la rayada”
Concluye el
tango, reiterando el buen momento ciudadano porque “hoy cualquiera toma el taxi
y no va de infantería, porque tanto el rico como el pobre ya no llevan
distinción, y si alguno patalea o no tiene compostura, que se compre dos
bufosos – pistolas - y se tire a matar”. Un poco trágico el último mensaje
invitando a pegarse un tiro, para aquellos que no asuman los cambios del
justicialismo que impuso el coronel.
Y en ese
tiempo “revolucionario” del peronismo, la Argentina también era país de acogida
y porvenir, como recoge el tango “Una carta para Italia” https://www.youtube.com/watch?v=ng3dnaYN8a4
del maestro Reinaldo Yiso, carta de vuelta para un italiano recién llegado, que
lejos de abordar su estancia con la tristeza del emigrante, lo hace desde el
sentimiento de la felicidad.
“Si vieras
Buenos Aires, que linda y que distinta es, de nuestra pobre Italia, cansada de
sufrir” y que le ofrece al emigrante “un suelo amigo donde dan ganas de vivir y
donde ya soy otro hombre que sueña con el día que pueda traerte junto a mí”.
En el tango la “Oda a Perón” https://www.youtube.com/watch?v=JWh7eFJkljY de Marino García, se recoge una crítica feroz para quien ostentaba la presidencia hasta 1943, el oligarca Pedro Pablo Ramírez, a quien sustituye el justicialismo que presidiría Juan Domingo Perón.
Y nuevamente el tango, vuelve hacerse eco del mensaje político recordando en sus estrofas el “oprobio general al oligarca vendepatria, que fue vergüenza e ignominia nacional”, a la vez que contrastando con Perón el “que trabaja y nos cuida desde que nace la aurora, robando tiempo a las horas, quitando vida a su vida”. Concluyen los versos del payador elogiando a "Juan Perón Presidente y General, el que comprendió las penas de la Nación librandola de tanto mal"
23 ene 2022
2 La poética de los tangos y sus personajes, El Llorón, Niño Bien, Haragán, Garufa y El Apache Argentino
En el tango El
Llorón de Enrique Cadicamo, al personaje se le cita como El Picaflor del
Norte (Colibrí pequeño de tierras bajas) experto en la conquista de la
mujer a través de una sutil estrategia, la de hacerse el llorón, sin importarle
lo que otros puedan pensar, porque para la seducción el llorón es un artista y
no hay quien se le resista.
Y asi el llorón
va conquistando mujeres, haciéndose el cortes, y como dice el tango - mientras
que por diversión tallo y trompo - va ofreciendo flores, con su pico de jarabe dulzón,
siendo el primero para el enamoramiento.
Yo soy, para el amor muy blando
Y la mujer, pa´ conquistarla
Yo le hago ver de cuando en cuando
Que hay que llorar pa´ enamorarla.
En el tango
Niño bien se desnuda la mentira del pretencioso y engrupido personaje que
presume de la nada y que pretende engañar a todos y a todas a través de un
personaje que al final solo es mentira por mucho que se disfrace.
Y el tango duro con la apariencia, vuelve
una y otra vez a dejar al personaje en el ridículo más espantoso, recordando
que su nacimiento fue en el suburbio en un bulín alumbrado a querosén de una
familia con pedigrí bastante turbio y no de una familia bien como presume. Y
como receta final para el engrupido niño bien el tango le cita la hilacha que
le cuelga de la manga para decirle que la puede lucir detrás del mostrador como
dependiente.
Niño bien, que
naciste en el suburbio
De un bulín alumbrado a querosén,
Que tenéis pedigrí bastante turbio
Y decís que sos de familia bien,
El tango canción Haragán de los
maestros Manuel Romero y Luis Bayón Herrera, se personaliza a todos
aquellos que hacen de la gandulería su oficio, mientras se creen nacidos para
ser sultanes, a ellos, les dice el tango que salgan del letargo, que despierten
de la siesta y se pongan a ganarse el pan.
A ese haragán
le ridiculiza el tango, recordándole que el día que se caso, el cura le dijo
que la cosa debía ser mantener a la mujer, y no al revés como el haragán lo
entiende y quiere, por eso la mujer harta de soportar tanta gandulería lo manda
al campo a cachar giles a engañar a tontos, porque estar enamorada y vivir del
cuento no da para tanto.
dijo el tipo ‘e la sotana:
"El coso debe siempre
mantener a su fulana".
Y vos interpretas
las cosas al revés,
¿que yo te mantenga
es lo que queréis?
Al campo a cachar giles
que el amor no da pa' tanto.
A ver si se entrevera
porque yo ya no te aguanto...
El personaje
mítico del tango Garufa del musico y compositor Juan Antonio Collazo Patalagoiti,
nos describe a un milonguero elegante, cargado de ambición, cumplidor con su
laburo durante la semana, y milonguero rompedor el sábado noche.
Ese garufa divertido, de quien dijo
su madre ser un bandido, porque le vieron salir del Parque Japones, bailador de
pro, que en cuento llega a la milonga se convierte en el mejor vareador el que
mejor coquetea con las mujeres, y capaz de bailarlo todo – la Marsellesa, la
Marcha garibaldi y El Trovador – pero que cuando vuelve a casa se conforma con
un café con leche y una ensaimada, a la vez que se reconoce como la mejor rana
un avispado fenomenal.
Un personaje de los que abundan en
el tango, siempre dispuesto a la apariencia pero, especialmente los fines de
semana, que se transforman como dice el tango canción en un garufa por lo bacán,
doctor elegante con polainas y cuello duro, agradable siempre, el mejor para la
milonga y la jarana.
Caes a la milonga en cuanto empieza
y sos para
las minas el vareador;
sos capaz
de bailarte la Marsellesa,
la Marcha a
Garibaldi y El Trovador.
Con un café
con leche y una ensaimada
rematas esa
noche de bacanal
y al volver
a tu casa, de madrugada,
decís:
"Yo soy un rana fenomenal".
El Apache argentino, es otro de los personajes del tango, que nos narra a un milonguero de raza y de gran astucia y valor. Este tango canción es obra del pianista y compositor uruguayo Manuel Aroztegui, quien toda su obra artística la llevo a cabo en Buenos Aires.
La
poética del tango nos describe a este Apache Argentino, como un hombre
valiente, dispuesto “a vengar con coraje a quien se atreva a ultrajar a su
amor”, astuto, altivo y por supuesto diestro con el puñal para hacer frente a
cualquier canflinfle, proxeneta o matón, un ser desheredado de la fortuna, pero
de muy noble de corazón.
Es el
apache argentino
el tipo fiel de una raza
que se echa ‘e ver por su traza
la astucia de su valor.
¡Y ay de aquél que se atreviera
a hacer de su amor ultraje!,
14 ene 2022
1 La poética de los tangos y sus personajes, El Cuarteador de barracas, El Taita del arrabal, El Ciruja, Langosta y El Carrerito.
En el tango se citan personajes, digamos “celebres” capaces de dar sentido a pequeñas y grandes historias, de reconocimiento personal y sobre todo de amores y desamores.
En la
poética del tango vamos a recordar alguno de estos personajes como el Taita,
Ciruja, el Cuarteador de Barracas, Llorón, Langosta, El Apache Argentino, el
Niño Bien, Haragán y el Carrerito, personajes que tienen su protagonismo en
nuestras milongas.
En el tango “El Cuarteador de Barracas” de Aníbal Troilo, se nos presenta a Prudencio Navarro, poseedor de un pingo que en el barro a cualquier carro tira y saca, un caballo que la canción ejemplariza como el overo - percherón de fuerza - capaz de sacar de la zanja la rueda empotrada de un solo tirón.
Y asi
Prudencio Navarro “ilustre” personaje de Barracas, necesario en la travesía, se
concede licencia poética para las cosas del querer, al comparar la zanja de
ayer, con la que hundió su corazón el amor de hoy, la zanja de la que no puede salir
ni con su caballo percherón.
Yo soy Prudencio Navarro
El cuarteador de Barracas
Tengo un pingo que en el barro
Cualquier carro tira y saca.
Hoy que el carro de mi amor
Se me encajó
No hay uno que pa ‘mí
Tenga un tirón.
En el tango
del “Taita del Arrabal” de los maestros Manuel Romero y Luis Bayón, se
nos presenta al “malevo” pendenciero y provocador del mal vivir, a quien las
minas cortejaban, por muy mal que las trate.
Ese malevo
altivo, que como dice el tango tiene melena recortada y buen vestir, capaz de
encandilar a todas, y no respetar a ninguna, resulta que ahora pretende
abandonar esa vida de violencia, resultándole imposible, por encontrarse
perdido y como dice el tango “bien cargado de morfina”.
Pero una vez
más el tango, poniendo orden en la vida social de aquel entonces, nos cuenta como
el Taita del Arrabal, el que lucía en la milonga después de una noche de
juerga, se va a encontrar con la horma de su zapato, otro bravucón como el, quien
revolver en mano le va a causar la muerte, y con ello su frágil deseo de
cambiar el rumbo de su vida.
Y la linda vida antigua
Por otra abandonó
Y cuando acordar quiso
Con un taura se encontró
Relucieron los bufosos
Y el pobre taita cayo
En el tango “El
Ciruja” del maestro Francisco Alfredo Marino, se vuelve a evocar al guapo
del arrabal, al que vivía siempre entre bronca y junando por el rabillo del
ojo, mientras caminaba al nido donde recordar las muchas horas de garufa y
juerga que vivió.
Ese Ciruja que,
enamorado de una mujer, engrupida, pretenciosa, que le está enredando con
cuentos y jugando con su pasión, resulta que le está engañando con su amante un
musico, con el que al final, frente a frente y dando muestras de coraje, se van
a enfrentar a un duelo a cuchillo, donde el Ciruja, diestro para el tajo al
musico le hace pagar caro su amor.
Y la poética del tango no podía faltar, y ya libre de la prisión - la gayola- el bueno del Ciruja descubre que su amor de siempre está ahora de quemera recogiendo la basura y en mala posición lo que le hace llorar.
El Ciruja Recordaba aquellas horas de garufa, donde una moza lo enredaba con sus cuentos Y jugó con su pasión. Frente a frente y dando muestras de coraje, Los dos guapos se trenzaron en el bajo
Y el ciruja, que era listo para el tajo
Al musico le cobró caro su amor
Langosta
apodado “El Cebollero”, es otro de los personajes del tango al que aseguran, le
vieron llorar por penas de amor, una noche de crudo invierno, con mirada triste
y el pucho apagado en la boca.
Y el malevo
de cuchillo fácil y mueca feroz, dicen que saco un retrato y se puso a llorar,
el retrato de Carmen la hija de Giacumin, quien tiempo atrás le había negado su
amor, con mucho pesar, y que el tiempo bien pudiera haberle devuelto la
esperanza.
Y una vez
más la poética del tango, nos vuelve a reseñar a dos personajes uno, al grotesco
y bicho raro, al que observan “las viejas y los niños” y el otro, que,
abandonando su condición de malevo por penas de amor, cuentan que lo vieron
borracho y con hondo dolor.
Una noche muy cruda de invierno
A Langosta lo vieron pasar
Las viejas decían: Son penas de amor
Que tarde o temprano se habrán de saber
Ya la tarde
se apagó
Pero en los ojazos de ella
Ha vuelto a salir el sol
Desata
alegre la Caballada
Y tras la cena, corta y sencilla
Pulsa la viola y un tango ensilla
Con el recuerdo de su canción
23 dic 2021
La poética del tango El choclo
El Club del tango Cambalache, recoge en su página web, una reseña sobre el título del El Choclo, situándolo en una pensión - "El Pinchazo" - que según parece, tenía una enorme olla de la cual los parroquianos, extraían el puchero, buscando siempre lo más apetecible el choclo (Mazorca, alimento de origen vegetal, perteneciente al grupo de los carbohidratos almidonados, y contiene vitaminas y minerales).
Este tango sujeto a múltiples adaptaciones ofrece en la de Enrique Santos Discépolo del año 1947, su mejor referencia, al evocar al tango como un estilo de vida, para el “burlón y compadrito” compañero de la ambición y con mucho deseo de salir del barrio “buscando el cielo” entre la “conjura del extraño y el amor que se repite, por caminos de esperanza”.
Y entre el deseo
de alejarse del barrio y el tango triste como amigo, “las paicas y las grelas”,
las mujeres que compartieron la milonga y la poesía de la calle hoy ven como “Carancanfunfa
se hace a la mar con tu bandera” brindando con pernod (anís francés) y mezclando
a Paris con su añorado Puente Alsina.
El
milonguero, “triste compadre del gavión y de la mina”, bacán que sedujo a las
mujeres, aparentado en muchos casos lo que nunca fue, reo de amigo de juergas
de tajo y cuchillo, aquel, que ardió en los conventillos, hoy se va a la
emigración a enseñar a bailar el tango, mientras vuelve a recuerda a las
mujeres con polleras rectas y tajo al costado, a los guapos de cuchillo a la
cintura y al conventillo que prendió en su corazón.
A ese milonguero de ambición sana le escribe Santos Discépolo en El Choclo,
deseándole suerte, y cierto reconocimiento para hacer carrera en la enseñanza
del tango por Europa. Pero como buen tango, los sentimientos afloran en la despedida,
y con ello la inseguridad del viaje mientras recuerda lo que deja atrás y el
mejor de los deseos para encontrar el cielo.
El Choclo
Letra de Enrique
Santos Discépolo y música de Angel Villoldo
Con este tango que
es burlón y compadrito
Batió sus alas la ambición de mi suburbio
Con este tango nació el tango, y como un grito
Salió del sórdido barrial buscando el cielo
Conjuro extraño de un amor hecho cadencia
Que abrió caminos sin más ley que la esperanza
Mezcla de rabia, de dolor, de fe y ausencias
Llorando en la inocencia de su ritmo juguetón
Por tu milagro de
notas agoreras
Nacieron, sin pensarlo, las paicas y las grelas
Luna en los charcos, canyengue en las caderas
Y un ansia fiera en la manera de querer
Al evocarte, tango
querido
Siento que tiemblan las baldosas de un bailongo
Y oigo el rezongo de mi pasado
Hoy, que no tengo más a mi madre
Siento que llega en punta 'e pie para besarme
Cuando tu canto nace al son de un bandoneón
Carancanfunfa se
hizo al mar con tu bandera
Y en un pernód mezcló a París con puente Alsina
Fuiste compadre del gavión y de la mina
Y hasta comadre del bacán y la pebeta
Por vos shusheta, cana, reo y mishiadura
Se hicieron voces al nacer con tu destino
¡Misa de faldas, querosén, tajo y cuchillo
Que ardió en los conventillos y ardió en mi corazón
17 dic 2021
Poética del tango Naranjo en flor
Hablar de la
poética del tango, es hablar del poeta y letrista, Homero Expósito. Maestro que
supo unir la prosa al tango – canción, aportándole bellos poemas que le dieron
relato de calidad, a cada una de las estrofas de sus tangos.
Entre ellas,
el “Naranjo en flor”, una hermosa canción del año 1944, que relata entre sus
cuatro estrofas, los sentimientos de una mujer a quien describe como el “agua
blanda y fresca de olor a naranjo en flor”, que en una calle perdida de un
barrio cualquiera, dejo un pedazo de vida, sin acabar de comprender el porqué
de tanto abandono.
Era más blanda que el agua
que el agua blanda
Era más fresca que el río,
naranjo en flor
Y en esa calle de estío,
calle perdida,
dejó un pedazo de vida
y se marchó.
Y en esa
situación de desamparo, el tango vuelve a un relato metódico que enseña”
primero a sufrir, después amar, para al final partir, entre el perfume del
naranjo”, olvidando las promesas que se fueron con el viento.
Primero hay que saber sufrir,
después amar, después partir
y al fin andar sin pensamiento.
Perfume de naranjo en flor,
promesas vanas de un amor
que se escaparon en el viento
Aquellos momentos de felicidad, hoy perdidos y evocados en el tango, como la “eterna y vieja juventud que la dejo acobardada, como un pájaro sin luz”. Licencia del poeta que pone sobre el pájaro el amor perdido, para finalizar preguntándose “que le habre hecho para dejarme con tanto dolor” allí, en la vieja arboleda, en la canción de esquina donde quedo el pedazo de su vida.
Después, qué importa del después
Toda mi vida es el ayer
que me detiene en el pasado
Eterna y vieja juventud
que me ha dejado acobardado
como un pájaro sin luz.
¿Qué le habrán hecho mis manos?
Que le habrán hecho,
para dejarme en el pecho
tanto dolor?
Dolor de vieja arboleda,
canción de esquina,
con un pedazo de vida,
naranjo en flor.
Como en
muchas canciones, el tango, vuelve una y otra vez a recordar los amores
perdidos, el abandono, la sin razón de promesas que como en el “naranjo en
flor” se las lleva el viento destrozando ilusiones.
2 dic 2021
La poética del tango, Al mundo le falta un tornillo
22 nov 2021
La poética del tango, Melodía de Arrabal
Hay un fueye que rezonga
En la cortada mistonga
Es toda su fortuna
Hay un fueye que rezonga
En la cortada mistonga
Mientras que una pebeta
Linda como una flor
Espera coqueta
Bajo la quieta luz de un farol
Barrio, barrio
Que tenés el alma inquieta
De un gorrión sentimental
Penas ruego
Esto todo el barrio malevo
Melodía de arrabal
Perdona si al evocarte
Se me pianta un lagrimón
Que al rodar en tu empedrao
Es un beso prolongao
Que te da mi corazón
Cuna de tauras y cantores
De broncas y entreveros
De todos mis amores
En tus muros con mi acero
Yo grabé nombres que quiero
Rosa, la milonguita
Era rubia Margot
En la primera cita
La paica Rita me dio su amor
10 nov 2021
El tango Cambalache presente ayer, hoy y mañana
Pero el Cambalache de ayer, bien pudiera decirse que es el cambalache de
hoy. Con otros personajes, pero en el fondo de la crítica mismo, basta con
seguir la letra de este tango atemporal, para comprobar las sucesivas llamadas
que se hacen a lo bueno y a lo malo, a robar y hacer el bien, a matar o curar, etc.,
llamadas que en otro contexto hoy también pudieran decirse a modo de denuncia
política.
Pero vayamos por parte:
“Que el mundo fue y será una porquería”, no deja de ser una expresión especialmente radical al
referirse al “dos mil también” aunque para muchas personas, ayer, hoy y posiblemente mañana no deje de
ser una vida pésima, en la que solo han encontrado “chorros, y maquiavelos” personas
que siempre obran con astucia y engaño para lograr sus ventajas, sin
importarles los medios convirtiendo los “valores en dublés” a través del engaño.
Y entre comparaciones estaba el tango, cuando confronto al ciudadano que va por la vida de forma correcta “por derecho” con el “ignorante o estafador” concluyendo que “es lo mismo ser un burro, que un gran profesor”.
Han desaparecido los “aplazados que esperan en el escalafón” su momento para optar a la gloria, y como dice el tango los han “igualádo con los que con impostura, ignorancia y caradura”, se mezclan con “el cura y el señor”, y como ejemplo de tanto desatino, el compositor Discépolo nos recuerda que la sociedad mezcla personas de reconocimiento social, con los inútiles del momento “como el famoso estafador Stravisky , con el fundador de la Orden Salesiana Don Bosco, a la mujer mantenida La Mignon, con Don Chicho el jefe de la mafia argentina, y Napoleón, al famoso boxeador italiano Carnera y San Martín...”
Concluyendo el cambalache de aquel siglo veinte problemático y febril,
con un mensaje a la necedad como si la situación no tuviera remedio recordando
que “el que no llora no mama y el que no roba es un
gil, a la vez que le invita a que no piense más, porque a nadie le importa si
nació honrado”. Así que no se esfuerce demasiado porque “da lo mismo trabajar como un buey, que vivir de los otros sin dar un palo
al agua”
Y así va transcurriendo de milonga en milonga el tango Cambalache,
recordándonos que la sociedad en general y las personas en particular, deben
ser respetadas y reconocidas por sus valores, y que no son lo mismo personas
que con inteligencia contrastada perseveran en hacer el bien, que los otros que
con malas artes se aprovechan para su propio beneficio.
Cambalache ayer, hoy y mañana, nos descubre un sendero de denuncia por el que caminar, y para los milongueros que disfrutamos del baile del tango una canción referente, de un autor, Enrique Santos Discépolo, actor, director de cine y teatro y sobre todo, compositor entre otros de los tangos famosos Yira, Uno, Cafetín de Buenos Aires...