A las
doce de la noche, después de haber dado cuenta a una cena de picoteo, con la Cumparsita
de Carlos Gardel - homenajeado por nuestra milonga de hoy – se abrió la fiesta que
nos fue llevando desde el año 1927 con la Cumparsita, hasta 1935 con Volver. Tango
y mas tango, que con la “rutina” de siempre nos fue invitando a bailar
recordando las buenas formas en las series “no siempre cumplidas” y que Loli
las recordó, pero fue una noche de risas y bromas que también en el tango
consigue cuando la milonga se disfruta buen ambiente.
Y
una vez más, muchas gracias a Maribel y Joaquín por hacer posible una noche
inolvidable entre amigos, muchas gracias por permitirnos bailar en el mejor
salón tanguero de Santander, La Capillita que rebosa por sus cuatro esquinas
sabor a tango y a camaradería, muchas gracias a todos – también a los que no
pudisteis estar – porque juntos formamos una hermosa piña de tangueros, que ya
va para algunos lustros, y que bien merece evocar el tango de los “Amigos que
yo quiero” del maestro Hugo Gutiérrez.
En
la vida tenemos mil cosas,
que son
grandes, sublimes y hermosas,
que ennoblecen
y alegran el alma.
Alentandonos el corazon
Pero
hay una, sutil y suprema,
Que nos
llega tranquila y serena,
Es hombría
y lealtad,
Sentimiento
y bondad,
Es sublime,
se llama amistad.
y
por supuesto gracias a Luis Alberto que con su equipo fotográfico dejo plasmada,
no solo la foto de familia, sino las galas que lucimos, por algo nuestra
milonga fue y será siempre una milonga de gala.
Felices
Fiestas.
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