Muchas gracias para todos los que me habéis mandado felicitaciones durante estas navidades, mil veces gracias, para aquellos que lo hicisteis de corazón, convencidos de que detrás de ese email – mas o menos entretenido – había un mensaje sincero y de verdadera amistad, por que estas felicitaciones son especialmente de agradecer en este año que ahora empieza, y que no auguran al menos a corto y medio plazo mas que la continuidad de la crisis y con ello la perdida de empleo (3.923.603 parados) y cierta desestabilidad social, a la vez que desencanto en muchos políticos de los que están obligados a resolver la crisis.
Soy consciente que no existen recetas mágicas para devolver la confianza en el consumo, para que las entidades bancarias faciliten crédito o ciertos empresarios dejen de aprovecharse de los expedientes de regulación de empleo, pero de lo que si estoy convencido es que el sindicalismo debe tomar decisiones en este momento con posturas firmes, y no esperar a que por miedo las tomen otros a modo de reformas laborales que solo harán posible que los trabajadores tengan que recortar derechos ganados en el tiempo, porque la crisis pasara, y los pasos atrás que los trabajadores y sus organizaciones sindicales den, luego es muy difícil recuperarlos.
En estos días se abre nuevamente las mesas de dialogo social, por lo tanto mucho cuidado con lo que se pacta, la patronal a hecho de la reforma laboral su principal estrategia, pero no precisamente para crear nuevos trabajos, sino para los que se puedan crear lo sean de peor calidad y mas baratos a la hora del despido, esperemos que los sindicatos presentes en la concertación no caigan en la trampa de las falsas promesas.
este comentario es lo mismo que yo pienso, gracias por espresarlo de una manera tan clara, un saludo.
ResponderEliminar