Dice la sección sindical de USO, que los trabajadores de Lupa están “acudiendo al trabajo con miedo” debido a los atracos que se están produciendo en la zona de cazoña, a la vez que reiteran la solicitud que hicieron hace un año de vigilancia profesional para estos supermercados.
Una solicitud que parece duerme el “sueño de los injustos”, porque al menos hasta la fecha la dirección de la empresa no da señales de vida, y con el argumento del coste económico que supone, mira para otro lado esperando que estos atracos desparezcan por inspiración infusa, pero que va, los atracos en los supermercados no acaban, puede que durante algún tiempo se calmen, pero a nada que te descuides vuelven aparecer, como ha sido ahora en Cazoña, donde en ambos casos los atracos se han hecho con pistola en mano.
Me imagino que la empresa no esperara a que haya una desgracia irremediable para tomar medidas en el asunto, hay demasiada legislación en materia de prevención de riesgos que la obligan a cuidar de la salud laboral de sus empleados y que mejor forma de hacerlo que cuidando el riesgo de atraco a las cajeras.
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