Ahora resulta que las aceras de la calle Madrid van a tener anchura suficiente para dos personas y/o la silla de ruedas digamos de mi madre que vive allí, pues va a ser que no, a nada que se crucen, alguien deberá irse a la carretera – ya esta demostrado – y lo que es peor por culpa de haber retrancado la acera en al menos cuarenta centímetros la anchura de la acera anterior, por cierto eso de que se guarda la línea entre acera de la misma calle no es verdad - que pena.
Pero no importa, según el Sr. Arasti habrá que esperar a que se acabe la reforma, para valorar el conjunto, y lo que no va en lágrimas, ira en suspiros, de lo que se trata es hacer que se hace aunque lo que se haga se haga mal.
Y si seguimos apurando la razón, lo que importa es el conjunto de la ciudad y sus reformas, que mas da que la calle Madrid vaya a quedar una vez mas apretada, ya esta la reforma de la calle Floranes que nos dejara en vez de aceras avenidas aunque para ello nos estén dejando sin aparcamientos.
Bienvenidas sean las reformas de las aceras y las calles peatonales pero por favor que se hagan con cierta lógica pensando también en las personas impedidas, cosa que según mi opinión no se esta haciendo en la calle Madrid, ahora es el momento, mas vale repartir los espacios de ambas aceras que dejar con dificultades de transito una de ellas, por cierto esta muy bien que los concejales regionalistas visiten las obras municipales y denuncien lo que esta mal, eso también es hacer oposición en positivo.
Tienes toda la razón, no se sebe muy bien quién está haciendo el diseño de todas estas reformas urgentes. Desempolvar proyectos para paliar la crisis no siempre está dando los resultados esperandos.
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