Dia
Internacional de la mujer …. trabajadora
Por Manuel
Zaguirre*
No pretendo ser cenizo pero
esta efeméride del 8 de Marzo requiere de alguna vuelta más, no sé si hacia el
pasado o hacia el futuro. Me refiero a que la identificación de la fecha como “Día
Internacional de la Mujer” a secas no debería quedar acuñada “ad eternum” sin
más razón que la fuerza acrítica de la costumbre, máxime si tenemos en cuenta
que hasta no hace mucho era el “Dia Internacional de la Mujer Trabajadora” y el
adjetivo no era caprichoso.
La conmemoración arranca en
unos hechos trágicos: El incendio en la fábrica de camisas Triangle Shirtwaist
de Nueva York que provocó la muerte de 146 mujeres –trabajadoras, obviamente-.
Muchas murieron abrasadas y otras al arrojarse por las ventanas huyendo de las
llamas. Los capataces no quisieron o no pudieron abrir las puertas de salida,
que estaban cerradas a cal y canto para evitar la irrupción en la fábrica de
“alborotadores” (sindicalistas)… Fue un crimen. Corría Marzo de 1911.
(No puedo dejar de recordar
con extremada emoción a las compañeras de la USO y de otros sindicatos que
protagonizaron una larguísima y heroica lucha por sus puestos de trabajo y por la salvación de su empresa… Camisas IKE, de Gijón)
Esa sangre derramada por las
compañeras norteamericanas no era abstracta ni difusa en cuanto a sus causas:
Salarios justos e iguales a los de los hombres, condiciones de trabajo seguras
y saludables, respeto y amparo a los derechos y necesidades maternales en los empleos mal llamados “femeninos”, el textil
muy especialmente en la época.
A qué les suena todo eso en
la España, en la Europa del Sur, en el Marruecos, en el Bangladesh de hoy …
donde el pasado año murieron abrasadas más de 1000 mujeres en una fábrica
textil en condiciones infrahumanas de producción, seguridad y retribución…
La sangre derramada por las
mujeres trabajadoras de la Triangle Shirtwaist regó de indignación, de dolor,
de reivindicación, de solidaridad y de lucha por la igualdad el planeta entero.
En memoria de aquella masacre y de las reivindicaciones de aquellas obreras
textiles se instituyó el 8 de Marzo como “Día Internacional de la Mujer
Trabajadora”, gracias al esfuerzo del Movimiento Sindical y de los partidos
progresistas y de países de avanzada en la época, como los escandinavos o la
extinta URSS.
La efeméride, de ahí su
nombre completo, tuvo siempre un profundo significado clasista, expresando la
contradicción central entre el Trabajo Humano y la apropiación del valor del
mismo por el capital… Contradicción, dolorosamente, más vigente que nunca en
nuestros días ante este capitalismo globalizado que niega y combate el valor
social, productivo, legislativo, salarial,
del Trabajo Humano , para acumular niveles de riqueza paranoicos…
En 1977, la ONU declaró el 8
de Marzo “Día Internacional de los
Derechos de la Mujer y por la Paz Mundial”, arrumbando definitivamente el
adjetivo “trabajadora”. Las diversas corrientes feministas, así como el
Movimiento Sindical y las fuerzas progresistas, dieron por buena la mutilación
y hasta hoy.
Pues lo siento, pero yo creo
que el tema debe ser retomado, como mínimo para provocar un debate. Porque la
contradicción central de nuestro mundo, insisto, con evidentes signos de
agudizarse en nuestra contra, sigue siendo entre el Trabajo Humano, fuente de
vida y progreso por excelencia, y este capitalismo salvaje que patea el planeta
sin importarle nada el alto coste social y humano de ese pateo.
Por supuesto, en el universo
del Trabajo Humano el mero hecho de ser mujer es causa de discriminaciones e
injusticias sin cuento; a las pruebas de la realidad española me remito. Y por
ello, justamente, un 8 de Marzo de fuerte identidad clasista es tan necesario
como siempre.
Se me ocurre que la CSI
(Confederación Sindical Internacional), 170 millones de trabajadoras y
trabajadores organizadas en el mundo, y que con tanta ilusión y esfuerzo de
años alumbramos en 2006, debiera solicitar a la ONU que se reinstaure el “Día
Internacional de la Mujer Trabajadora”. Razones sobran para ello. Mi buen amigo
y compañero, Guy Ryder, primer
secretario general de la CSI de 2006
a 2010, y hoy Director General de la OIT, una de las más
importantes Agencias de la ONU, sería un excelente vocero ante la Asamblea
General de la ONU para que se devuelva al 8 de Marzo su identidad originaria,
por ser ésta tan vigente como hace un siglo.
Que así sea.
*ExSecretario General de la
USO
(8 de Marzo de 2015)
No hay comentarios:
Publicar un comentario